2015 ha sido el año de su popularización, aunque los programas para el bloqueo y filtrado de anuncios en Internet existen desde hace años.
Los ad blockers se han convertido en todo un problema para el futuro inmediato de la publicidad online. Hay informes que calculan que alrededor de 200 millones de personas en todo el mundo utilizan ya algún software de bloqueo, lo que representa un incremento del 41% respecto a 2014; y la previsión es que durante 2016 su impacto vaya en aumento, lo que provocará un cambio en las estrategias de los diferentes agentes para intentar mitigar sus efectos.
Se estima que el 33% de los consumidores de los EE.UU. probarán algún tipo de software de bloqueo durante el primer trimestre del próximo año.